Un recorrido por la historia
A fin de honrar a los grandes hacedores de nuestra ciudad, y a los complejos procesos que acompañaron el nacimiento y consolidación de Puerto Vilelas, fijamos convencionalmente una fecha que consideramos dio inicio a esa construcción: el 10 de junio de 1910.
Sin embargo, al rememorar la trayectoria histórica de Vilelas, podemos remontarnos en el tiempo, tan lejos como nos animemos, a buscar indicios de sus orígenes. Es así que hacia el 1800 nos encontramos con grupos de aborígenes vilelas, que se asientan en las costas del río Paraná, y comienzan a dispersarse por zonas próximas al actual Puerto Vilelas. Ramón Tissera, periodista, legislador e historiador chaqueño consideraba que estos aborígenes “eran los mejores flecheros del Chaco viejo”.
Toponimia de Puerto Vilelas.
Toponimia de Puerto Vilelas.
Hacia 1810 se produce la Revolución de Mayo. Las guerras por la independencia obligarían a los primeros gobiernos de las Provincias Unidas a la defensa contra las acciones españolas, a los diversos intentos de organización que se irían sucediendo. Las luchas internas que estallaron a partir de 1815, generarían que la atención se centrara en estos temas, por lo cual la región chaqueña era conocida en los mapas, en los relatos de los viajeros, en los artículos periodísticos como el “Territorio Indio del Norte”, es decir, se pensaba que toda la zona que incluía el Chaco era un espacio enorme, peligroso, en poder de grupos indígenas, a los que se temía porque eran muy belicosos. Vemos entonces que el Chaco en esta época era diferente a otras provincias que, como Corrientes o Córdoba, por ejemplo, hacía mucho que se habían organizado y participaban en la política nacional. En esta época, es decir, entre principios y mediados del siglo XIX, la movilidad y la resistencia de los grupos aborígenes impedían la incorporación del Chaco al territorio nacional y creaban problemas en las fronteras de cada provincia que compartía sus límites con Chaco. Y cada provincia debía ocuparse de asegurar la defensa, para evitar o contener los ataques de los grupos indígenas. Para ello usaban sus propias estrategias buscando asegurar esta defensa, así por ejemplo Corrientes, firmaría sucesivos tratados de paz con los jefes de los grupos indígenas, obteniendo la colaboración de los indígenas y el fin de los malones, por lo menos temporalmente. La provincia de Salta, en cambio, prefirió construir una eficaz línea defensiva de fortines, con milicias que vigilaban las zonas y rechazaban los ataques. En 1825, por ejemplo, el gobernador de Corrientes, Pedro Ferré firma un Tratado de Paz con varios caciques chaqueños.
En 1862 se sancionó la ley Nº 28, que establecía que todos los territorios nacionales existentes fuera de los límites o posesión de las provincias, eran nacionales. Ese mismo año, se firma un Convenio, durante la administración del Gral. Bartolomé Mitre, con el Capitán José Lavarello a través del cual se lo autoriza explorar el Río Bermejo estableciendo una línea de vapores especiales, otorgándose una serie de franquicias y exenciones impositivas a fin de consolidar la navegación por este río. El Capitán Lavarello cumplió sólo en parte el compromiso asumido, dado que sufrió numerosos contratiempos: perdió barcos, quedó arruinado por asociarse con personas de mala fe, y vio minada su salud a causa de los sufrimientos y penalidades en aquellas regiones desiertas y desconocidas.
En el año 1865 se construye, frente a Corrientes, a orillas del río Negro, la reducción San Buenaventura del Monte Alto, de indios vilelas. Esta reducción queda al mando del Cacique Leoncito, perteneciente a esta parcialidad.
Hacia 1868, en el discurso de apertura de Sesiones del Honorable Congreso, el Gral. Mitre, destaca los logros del Capitán Lavarello en su empresa de exploración del Río Bermejo.
En virtud del convenio celebrado por el capitán Lavarello, el Gobierno Nacional le cedería terrenos en la margen derecha del río Bermejo. Dado que no fue cumplida la misión en su totalidad, finalmente no se le concedieron esas tierras. Esto motivaría, años mas tarde, el reclamo de las hijas del capitán, Luisa y Matilde Lavarello.
En 1872, un decreto del entonces presidente argentino Domingo F. Sarmiento señalaba, por su parte, el inicio de la organización institucional del Chaco, que sería declarado Territorio Nacional.
En 1884 comienzan las grandes y definitivas campañas militares al Chaco, bajo el mando de Benjamín Victorica, Ministro de Guerra.
En 1894 el entonces Presidente de la Nación, Luis Sáenz Peña, responde el pedido de las hermanas Lavarello, firmando el decreto por el cual se le conceden las tierras prometidas a su padre, pero no sobre el Río Bermejo, sino sobre la margen izquierda del Río Arazá, en la Colonia Resistencia, hoy jurisdicción de Puerto Vilelas.
Hacia 1901, se produce el traspaso definitivo de la propiedad de las tierras a las hermanas Lavarello. A partir de allí se interpreta que las hermanas Lavarello tuvieron conocimiento de dicho dictamen y posesión del título de propiedad de las tierras que dieron origen a Puerto Vilelas.
Para 1909, Juan Vargas adquiere del Gobierno Nacional, una fracción del lote Rural 21. Vende este lote el 10 de junio de 1910 al arquitecto italiano Julio Gaspar de Nicola.
En 1911, De Nicola cede al Gobierno Nacional parte del terreno para la instalación del Ferrocarril del Estado, cuya infraestructura aún está en pie como testimonio de una época de esplendor de Pto. Vilelas. La venta de las tierras para el trazado del ferrocarril se considera el hecho fundacional de Puerto Vilelas.
Hacia 1914, De Nicola vende a Antonio Pastori el terreno donde poco tiempo se emplazaría la Fábrica de Tanino Z. Ese mismo año se venden lotes a Jesús Gutiérrez.
En 1918 la firma propietaria de la fábrica Tanino Z, en la figura de Don Antonio Pastori, adquirió tierras también para su planta fabril.
En 1920, la firma Atorresagasti, Burgués y Piazza, instala la Fábrica de Tanino en el Lote 21, con la que también se habilita un atracadero en el paraje Barranqueritas, para el transporte del tanino por el Riacho Barranqueras, que dará origen al Puerto de la localidad.
En este mismo año el emplazamiento, en su conjunto, pasa a llamarse oficialmente Puerto Vilelas. Las descripciones de la época, describen a Vilelas como una franja poblada, activa, con importantes fábricas instaladas: fábrica y refinería de aceite, fábrica de plomo, frigorífico COOP, entre otras. Existían además con comercios de diversos rubros.
En todo este proceso, emerge la figura de Don Antonio Pastori, que habría sido el primer gerente de la Tanino Z. Además de residir con toda su familia en Puerto Vilelas, estuvo presente en la compra del terreno a De Nicola, impulsó el proyecto y construcción de la fábrica, el chalet y viviendas para el personal. Organizó y puso en funcionamiento la Fábrica Tanino Z. También tuvo la iniciativa para el trazado de caminos y encabezó gestiones para la instalación de la primera Comisaría, la Escuela Primaria, y la Primera Parroquia, “Nuestra Señora de Itatí”.
La instalación de la fábrica dio origen al pueblo y así fue que se levantaron viviendas para los empleados de la Compañía, mientras que, a su vez, los obreros irían construyendo ranchos, al principio precarios, en los terrenos baldíos adyacentes.
En 1925 De Nicola dona un predio para la edificación de la primera Escuela Primaria de la localidad, hoy EGB Nº 69 “José Hernández”.
En 1926, la empresa “La Argentina Produce Cº Limited adquirió los predios donde se levantan las plantas de SHELL y ESSO.
Hacia 1935 Molinos Río de la Plata, obtiene las manzanas para construir su planta industrial, que se convertiría en la más importante de su rubro en la región.
En 1959,como resultado de las gestiones emprendidas por algunos ciudadanos, se otorga la Autonomía Municipal a Puerto Vilelas, siendo su primer Delegado Organizador Don José Genaro González, Don Pepe, quien también recibiría el voto popular que lo consagró Primer Intendente Municipal en 1960. A partir de allí, comenzaría la ardua tarea de organización institucional del Municipio.
En 2009 el Municipio de Puerto Vilelas, cumple su Cincuentenario, siendo Marcelo González, hijo de José G. González, quien se hallara al frente del Ejecutivo Municipal en esa oportunidad.
En 2010 festejo su Centenario Puerto Vilelas.